Millones de peruanos se encuentran aterrorizados. Y no es para menos: verse obligados a escoger a su Presidente entre la hija de un dictador corrupto que quiso perpetuarse a punta de represión y robo y un ex militar nacionalista, populista y ahijado de Hugo Chávez, es lo más parecido a una pesadilla. Como dijo Mario Vargas Llosa: "Es como decidir entre el sida y el cáncer terminal".
¿Cómo es posible que el país que mejores índices de crecimiento económico ha tenido en la región en los años recientes termine en semejante sin salida? Es cierto que los partidos tradicionales, tanto el Apra del actual presidente Alan García, como la vieja Acción Popular de Fernando Belaúnde, llevan años en crisis. Y que esa condición siempre es una puerta abierta al aventurerismo, que tuvo su primer y doloroso capítulo en el largo mandato de Alberto Fujimori.
Pero eso no basta para explicar que más de la mitad de los electores haya optado por la vía cuasi suicida de llevar a la segunda vuelta presidencial a Keiko Fujimori y a Ollanta Humala. Mucho menos si se tiene en cuenta que, fueron 10 los candidatos que participaron en la primera vuelta de las cuales pasaron los dos menos pensados.
إرسال تعليق
Aviso legal:
Procure comentar sin ofensas ni insultos hacia los demás. Si vuestro comentario incumple lo esperado, será eliminado y de reiterar en ello, inclusive puede ser bloqueado de esta web.
En Heraldo 21, promovemos el respeto por todos.
________________________